A más de cien días que el ayuntamiento de Othón P. Blanco se hiciera cargo de la administración del panteón campos del recuerdo, la situación de abandono sigue latente.
Las promesas de la presidenta municipal Yensunni Martínez Hernández y del cuerpo de regidores, fue a inicio del año, luego de haberse de la administración, las cosas cambiaría, se tendría un panteón digno, el cual está lejos de serlo.
El campo del recuerdo está abandonado y las condiciones que se encuentra, estaba más limpio cuando lo tenía el empresario Juan Xacur, y eso que solamente tenía 4 trabajadores, hoy tienen equipo de trabajo como podadoras, machetes, un administrador y 7 trabajadores del ayuntamiento, más personal particular que laboró con el empresario.
La administración está tan mal que es común ver los fines de semana al personal del ayuntamiento tomando bebidas alcohólicas en las puertas de la administración.
En los alrededores de las tumbas existe mucha basura, botellas de cervezas, ropa y telas de los ataúdes de las exhumaciones que han realizado y estos representan una fuerte fuente de infección, mucha maleza y espacios llenos, de botellas y vasos con agua los cuales son nidos de moscos, que propaga el dengue, Chikunguya, entre otras enfermedades.
Los negocios están a la orden del día, pues el viernes pasado una señora se quejó del jefe de departamento de funerarias y panteones, quien solo se dedica a lograr beneficio personal cobrando por trabajos dentro del panteón sin dar recibos oficiales por los servicios.
El departamento de funeraria tiene tan mala administración que hasta hoy no tiene carroza porque la ocupa para asuntos personales y no para los servicios fúnebres.