El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) ha informado de un incremento del 10.8% en la explotación laboral en Quintana Roo, registrándose 41 casos entre enero y junio, en comparación con 37 durante 2022. Benito Juárez fue la zona con más denuncias, acumulando 33 hasta junio.
Los oficiales municipales admitieron su conocimiento sobre la explotación infantil en las calles, sin embargo, la responsabilidad de intervenir recae sobre el Grupo Especializado en Atención a Víctimas de Violencia Familiar y de Género (Geavig), y el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF). Este último contaba con alrededor de 300 menores en resguardo hasta el pasado octubre.
Adela Jiménez Izquierdo, a cargo del Geavig en Benito Juárez, reveló que han identificado más de 20 casos de explotación infantil, la mayoría en la avenida Bonampak y áreas centrales. Sin embargo, no todos los niños han sido protegidos debido a la verificación de que provienen de familias necesitadas, donde los padres están desempleados y se ven obligados a solicitar caridad.
Asimismo, Jiménez Izquierdo enfatizó que la trata es un delito difícil de identificar inicialmente, ya que depende de múltiples factores, incluyendo la presencia de niños en semáforos vendiendo productos o pidiendo dinero. En una ocasión, tres niñas menores de ocho años fueron rescatadas de las calles luego de ser obligadas a mendigar para financiar los vicios de sus padres.
Respecto al aumento de este delito, el Geavig y el DIF continúan con inspecciones constantes. Cada posible caso de explotación se verifica minuciosamente, examinando el entorno del menor, la relación con los adultos presentes y la validación de documentos en sus domicilios para comprobar la relación familiar. Si no se establece tal vínculo, se informa a la Fiscalía General del Estado (FGE) para iniciar una investigación.
