A la vieja usanza del PRI, la presidenta municipal de Othón P. Blanco, Yensunni Martínez Hernández recurrió al acarreo y a las tortas y refrescos para llenar el Centro de Convenciones de Chetumal, donde rindió su informe de actividades.

A los trabajadores municipales se les dio el día con tal de que asistan al informe, sin importar dejar sin servicios a las personas que provienen de comunidades para realizar trámites en el Palacio municipal y en las demás dependencias de la comuna capitalina.

A otros empleados se les obligó a fungir como staff del evento, por lo que tenían que ir vestidos de negro para que pudieran ser identificados por sus jefes de área, quienes tomaban nota de quiénes asistieron y quiénes no, para aplicar las sanciones correspondientes.

Desde las alcaldías del municipio se organizó todo un sistema de acarreo de gente para llenar el recinto, tal y como era costumbre durante las administraciones priistas, pero que ahora la Cuarta Transformación está retomando en Othón P. Blanco, con miras a las elecciones del próximo año.

El informe de Yensunni fue tan largo, que desde antes que terminara, la gente empezó a abandonar sus sillas para formarse en la fila para recibir su torta y su refresco, tal y como se le había prometido a manera de recompensa por haber hecho bulto en el informe.

También se volvió a ver la segregación de personas, al otorgar a los políticos y a los altos funcionarios las primeras filas de adelante, mientras que los acarreados permanecieron en las filas más atrás, alejadas del escenario.

Con estas prácticas, el partido Morena que se encuentra en el poder en el municipio capitalino, encabezado por Yensunni Martínez Hernández, da muestras de desesperación por buscar perpetuarse en el poder enarbolando la bandera de 4T, sin importar que se recurra a las viejas prácticas del arcaico y desterrado priismo