La falta de liderazgo por parte del presidente Diego Castañón al frente del ayuntamiento de Tulum, no solo han hundido al polo en la inseguridad, sino también en la falta de servicios públicos tan elementales como lo es la recolección y eliminación de vertederos clandestinos.

Por cualquier calle, sin importar, es visible la cantidad descomunal de basura que se encuentran en áreas verdes, camellones, banquetas y cinta asfáltica. 

Diego Castañón, en las ultimas fechas ha de estar ocupado en “solucionar” la ola de asesinatos que ha azotado a Tulum, que hacienden a 92 en lo que va del 2023 y 78 de su administración.

O ha de estar pensando en su imagen pública con mira a la próxima contienda electoral.

En tanto, la imagen urbana y los basureros clandestinos están fuera de control, representando un riesgo significativo para la salud de los habitantes locales y los turistas que visitan la zona. 

La acumulación de desechos orgánicos en estos sitios se ha convertido en criaderos ideales para el Aedes aegypti, el mosquito transmisor del Dengue, Zika y Chikungunya.

Esto ha dejado entrever la falta de infraestructura y recursos destinados a solucionar la problemática.