Los Colchoneros procedieron en contra de su socio abonado, identificado por la policía, que el pasado 27 de abril habría ofendido racialmente al delantero del Athletic Club de Bilbao desde las gradas del Estadio Cívitas Metropolitano.

Atlético de Madrid confirmó este lunes que ha suspendido “cautelarmente de manera indefinida” al socio del club rojiblanco que fue el presunto autor del grito racista a Nico Willaims, delantero del Athletic Club, el pasado sábado 27 de abril en el Estadio Cívitas Metropolitano.

“Tras la identificación por parte de la Policía del responsable del presunto grito racista recogido en el acta arbitral y en el policial del encuentro y la comprobación por parte del club de que se trata de un socio abonado de la Grada de Animación, el Atlético de Madrid, aplicando su normativa interna, ha decidido suspender cautelarmente su condición de socio por tiempo indefinido mientras se resuelve su caso en los órganos sancionadores competentes”, señaló el club colchonero.

Este recalcó que su normativa interna tipifica como “muy graves” las faltas que supongan “un deterioro de la imagen, prestigio y consideración social” de la entidad y que vayan contra “el compromiso de este club en su rechazo y oposición a cualquier forma de violencia verbal o física y a todo acto racista, xenófobo o intolerante”.

“Reiteramos, una vez más, como ya expresamos durante el desarrollo del partido el propio 27 de abril, nuestra condena rotunda y sin paliativos ante cualquier acto que ataque la dignidad de personas o instituciones y nuestro compromiso para luchar y erradicar todo tipo de violencia en el deporte“, añadió el club que preside Enrique Cerezo.

Atlético de Madrid dejó claro igualmente que “se ha caracterizado en sus 121 años de historia por ser un espacio abierto e integrador” y que no permitirá que “la actitud de unos pocos manche la imagen de miles y miles de aficionados atléticos que apoyan a su equipo con pasión y respeto al rival”.

Con información de Europa Press